9 feb 2012

¿Fuerte reacción de los Obispos Americanos?

09-02-2012 17-26-36

Argentinos Alerta es una página web que publica informaciones de la línea “pro-familia”, contra el aborto, etc. No se define como un sitio web católico o religioso. Regularmente la leo, ya que tienen noticias de actualidad en el plano de la guerra sin tregua que el socialismo sonriente le declaró a la familia cristiana en esta última década. Guerra, como era de esperarse, que ha incrementado su intensidad y radicalidad, a pesar de la promesa socialista de “tolerancia”: esa hábil estratagema para desarmar a los conservadores y optimistas de siempre.

Cada vez que leía este sitio web, tenía la impresión de que había una pieza que faltaba, un elemento ausente para completar este cuadro. Elemento por el cual, el sitio web y su causa, no eran un auténtico movimiento contra-revolucionario. Hoy comprendí cuál es ese elemento central (además de la concepción laica que los inspira) y que impide que este sitio web entregue una visión de conjunto coherente; una visión de conjunto que explique a sus lectores, efectivamente, “por qué pasa lo que pasa”; por qué la situación de la familia cristiana llegó a este trágico estado de desintegración y de casi “extinción”, como si los restos que aún pueden encontrarse, fuesen restos arqueológicos de una era pasada.

clic en la imagen para ver el articulo in extenso

09-02-2012 17-29-49

La pieza que faltaba: denuncia a los obispos demoledores

Leyendo la última versión de este sitio web, comprendí cuál era la pieza que faltaba cuando vi el título entusiasta “Fuerte reacción de los obispos norteamericanos”, como si de héroes se tratase.

La historia reciente nos entrega la lamentable evidencia de que, muy por el contrario, más que heroica, la colaboración de los obispos norteamericanos fue decisiva para que quienes se definen católicos, votaran por Obama, sin ningún escrúpulo, tal como denunciamos en varios medios digitales en el artículo llamado “Convivir con el Abismo”, en diciembre del 2008 (1).

Según el “Pew Forum on Religious and Public Life”, centro de investigación de asuntos político-religiosos en Estados Unidos, el 54% de los autodenominados católicos declaró su intención de votar por Obama. Vea el recuadro que sigue. (2)

¿Qué habría ocurrido si los obispos norteamericanos hubieran hablado con la potestad de los príncipes de la iglesia?

Usando todo su prestigio – el cual aún está vigente, a pesar de los escándalos morales recientes – y toda la fuerza e influencia en la sociedad, podrían haber conseguido que los católicos no votaran por Obama. Tal vez, esto habría decidido la elección o al menos inclinado la balanza. Y en el peor de los casos, habría sido una barrera formidable para que el presidente electo, diera rienda suelta a sus políticas asesinas. Como todos saben, el costo de la baja popularidad es un costo que casi ningún político está dispuesto a asumir.

Los pastores guardaron un silencio cómplice

Para explicar mejor esta compleja situación, imagine Ud. la siguiente “fábula”. El propietario de un rebaño de ovejas le encarga a un trabajador que guíe el rebaño

desde un valle a otro, en el cual encontrarán verdes praderas. Le advierte al pastor, sin embargo, que en el camino encontrará enemigos “hambrientos” quienes intentarán devorar y perder las ovejas encomendadas. En medio de la travesía, el pastor ve una jauría de lobos feroces que se acerca al rebaño que inconsciente del peligro, pasa el día como si nada ocurriese. En ese momento en el cual debe alertar, el pastor decide guardar silencio y esperar, con “prudencia”. Y ocurre lo único que puede ocurrir, los lobos devoran el rebaño. ¿Qué clase de pastor es ese?

Esta fábula, por burdo que parezca, es lo que ocurrió con los obispos demoledores en Estados Unidos y el mandato de Nuestro Señor Jesucristo de apacentar sus ovejas. Guardaron silencio frente a la disyuntiva de los católicos: ¿era lícito votar por Obama, un congresista abortista que invariablemente promovió el aborto en su “carrera” política en trece ocasiones desde el 2005 al 2008?

Silencio total. Silencio cómplice y apóstata. Silencio anti-cristiano.

Alguien podrá objetar: “tal vez los obispos no sabían quién era realmente o cómo pensaba el congresista Obama”

Veamos cuál fue la declaración de Obama cuando comenzó su carrera presidencial, en Julio del 2007: “Lo primero que haré como presidente será firmar el Acta de Libertad de Elegir (FOCA, por sus siglas en inglés)… En este punto no cederé”(3).

Esta acta legislativa elimina todas las restricciones que el aborto aún puede encontrar en los Estados Unidos, de manera de que el aborto pase a ser, en términos simples, una política nacional de “salud”, más allá de las legislaciones federales vigentes.

Lo que los obispos norteamericanos sí dijeron

Sería faltar a la verdad afirmar que la Conferencia Episcopal de Obispos de Estados Unidos (USCCB, por su sigla en inglés), no dijo nada. Sí dijo algo: envió una carta de felicitaciones al recién electo presidente abortista. En ella, el Presidente de la Conferencia Episcopal Norteamericana, el Cardenal Francis George ¡le felicita por su triunfo en las elecciones y le ofrece oraciones y la colaboración para trabajar en conjunto!. Esto es equivalente a ofrecerle a un asesino, la colaboración necesaria para defender la vida. Es de todo sentido común que estaríamos perdiendo el tiempo y desviando la atención de lo que realmente importa: esto es, que la ofensiva abortista sólo podría embravecerse. Y eso fue lo que ocurrió.

Las felicitaciones de Benedicto XVI

La prensa informó que Benedicto XVI envió un telegrama al recién electo Presidente Obama, felicitándolo y ofreciendo sus oraciones para ayudarlo (¡!) en su gran responsabilidad y animándolo en su tarea de “construir un mundo de paz, solidaridad y justicia” (4).

La sede de Benedicto XVI le daba el sello oficial a la traición a los católicos norteamericanos, quienes perplejos veían que el Vaticano y los obispos daban todo su respaldo al abortista Obama. Ni la logia masónica mejor organizada lograría ese nivel de coordinación política.

En resumidas cuentas, tanto la omisión y posterior apoyo de los obispos norteamericanos y de Benedicto XVI, son las propias de anti-obispos y de un anti-papa.

Y ocurrió lo que tenía que ocurrir

El Presidente Obama acaba de impulsar el mandato de contracepción o HHS (Health and Human Services), el cual obliga a las compañías de seguros a incluir dentro de sus prestaciones, todas las drogas aprobadas por la FDA, incluyendo las abortivas. De esta manera, un empleador norteamericano deberá asumir el costo de proveer al empleado de fármacos abortistas y anti-conceptivos. Esta iniciativa tiene carácter obligatorio y deja a los católicos, doctores y empleados de la salud, asimismo como hospitales e instituciones de beneficencia sin salida: tendrán que colaborar con la política abortiva de Washington.

¡Y ahora los obispos norteamericanos hablan! Una vez que la jauría de lobos devoró el rebaño, el pastor avisa del peligro. Ahora que el mal se hizo con el triunfo casi total, los obispos levantan su voz y envían cartas a los fieles y a algunos congresistas (5).

Las preguntas que el sentido común manda hacer: ¿Por qué no hablaron antes? ¿Acaso desconocían todo lo relacionado con el congresista Obama y su trayectoria abortista? ¿Acaso no leyeron el periódico ni vieron los noticieros en el período de las elecciones? Entonces, ¿qué explica esta omisión colaboracionista? Sencillamente lo siguiente: la intención de omitir para colaborar.

El título del sitio web de Argentinos Alerta es optimista y omite la causa primera, la piedra angular de la situación desastrosa de la familia cristiana: la colaboración del clero y los obispos demoledores con la obra del socialismo satánico. Los elogios al obispado norteamericano constituyen un error que omite que lo primero fue el silencio colaboracionista y posteriormente una reacción a destiempo, cuando poco o nada queda para defender.

¿Pero qué explica esta puesta en escena como super-héroe a total destiempo?

No podemos saberlo con precisión, tal vez un intento por limpiar la imagen luego de la escalada de casos de pedofilia en el clero norteamericano. Tal vez, la razón sea otra. Quizá pronto, en algún exorcismo, un sacerdote pueda exigirle al demonio esta respuesta y enviarnos la información… de primera fuente.

NOTAS:

1. Este artículo fue publicado en varios sitios web, en este caso, recuperamos el link al artículo en inglés. http://www.traditioninaction.org/Cultural/E010cpAbyss_Zamora.htm

2. http://pewforum.org/docs/?DocID=367

3. Life Site News http://www.lifesitenews.com/ldn/2008/jun/08061010.html

4. ACI PRENSA http://www.aciprensa.com/noticia.php?n=23308

5. http://usccb.org/issues-and-action/religious-liberty/conscience-protection/index.cfm

2 comentarios:

  1. Anónimo13:10:00

    Tiene Ud razon..............y yo que estaba feliz, pensando que por fin habian empezado a despertar estos obispos. Claro que en el fondo me parecia raro tanta valentia, sobre todo en la jerarquia norteamericana.....pero por unos pocos dias tuve felicidad y llegue a creer que habian despertado.
    Att.: RuyDiaz

    ResponderEliminar
  2. Anónimo23:49:00

    Y.... esos son los obispos que nombró juanpi...que se puede esperar si no los mismos frutos de su jefe. El puente roto que trata los lobos como ovejas descarriadas y las mete dentro del rebaño.

    ResponderEliminar

Se permiten los comentarios anónimos sin necesidad de cuenta, los mensajes con groserías, apologia de ideas contrarias a las mias o brutalidades no se publicaran, no obstante ello de ser interesantes serán editados y publicados con la advertencia de que han sido modificados.